Si puedes evitar que los niños, sobre todo de infantil, vayan al colegio estos días, dejándolos con abuelos o con quien se pueda, es preferible que no vayan o que vayan sólo media jornada y recogerlos al mediodía para que duerman la siesta frescos en casa.
Con las altas temperaturas, los profesores no trabajan igual de bien, no se pueden hacer tantos juegos, bailes, salir al patio..., no se puede estar en un aula con 20-29 niños durante 8h al día, porque durante la noche y los patios se cierran las ventanas para que no se cuelen dentro de las aulas, y no se puede ventilar en condiciones porque a las 10 de la mañana hace demasiado calor ya y si abres entra aire caliente. Si sumas un uniforme que da calor en cualquier situación..., es para morirse.
Los profesores y jefaturas intentan refrescar a los niños cada poco tiempo, mojándolos, con hielos en clase para beber, con ventiladores..., como se puede.
Lo primero debería reducirse la jornada escolar en junio, aunque sea de 8h a 14h, y lo segundo permitir vestirse con camisetas de tirantes, ropa de tejidos frescos, etc., y no con el uniforme escolar.
No todos los colegios tienen aire acondicionado, aunque la buena voluntad de muchos profesores y padres permite que se tengan ventiladores o aparatos eléctricos similares, pero por el peligro de las aspas se prefieren ventiladores de techo o sin aspas. Sí se suele poner aire en los colegios privados, a diferencia de los concertados y públicos, debido en parte a los presupuestos. En algunos colegios sí que tienen aire acondicionado en comedor y algunas áreas comunes, pero no en las aulas.
También hay que pensar que no todas las comunidades autónomas tienen las mismas temperaturas, y puede ser que en la zona medio-sur haga falta instalar aires y en el norte sólo ventilación.
No hay una normativa que prohíba instalar aire acondicionado en los colegios, ni tampoco es obligatorio, pero por temas de Sanidad, debido a la legionella y otras enfermedades respiratorias que pueden propagarse fácilmente con el aire acondicionado, se decide que no es lo más recomendable, lo que sí se recomienda es extracción de calor por ventilación, toldos, árboles, etc.
Un colegio es un centro de trabajo como cualquier oficina o tienda. La temperatura debe oscilar entre los 17 y 27 grados, según el Real Decreto 486/1997 (BOE 23-4-97), si no lo hacen por los niños que lo hagan por los profesores y trabajadores de los centros.
Algún que otro inspector o responsable debería intentar dar clase a las 15h un viernes..., abanicándose, de mal humor, empapados de sudor...
No es que los niños toleren menos el calor que cuando nosotros éramos jóvenes, podríamos hablar del cambio climático, pero eso ya es otra cuestión. La realidad es que ahora mismo, sobre todo en la mitad sur de España, sufrimos olas de calor desde mayo a octubre. No es cosa de una semana, los trabajadores seguimos en los colegios fuera del periodo escolar, incluso en julio hay campamentos de verano en los colegios que se hacen el día entero en la piscina por ser imposible permanecer en un aula más de 15 minutos.
Podríamos apuntar a la Consejería de Educación como primera responsable, y, a falta de protocolos y normativas, el director del centro es quien debe controlar las temperaturas y tomar las medidas oportunas.